domingo, 30 de mayo de 2010

MICHIRONES


Los michirones son una receta típica de la gastronomía murciana. Este plato se consume fundamentalmente durante el invierno y se sirven muy calientes en cazuela de barro.

Un día de los que fuimos de excursión, una compañera de trabajo llevó una olla de michirones, no los había probado nunca, pero me resultaron exquisitos. Le pedí su receta y aquí el resultado.

Ingredientes:

- 1/2 k de habas secas

- 1 cabeza de ajos

- 1 cebolla

- 1 tomate rojo

- pimienta molida en el momento

- una añora cruda

- 2 chorizos picantes

- tocino (yo no le puse)

- huesos de jamón en remojo de la noche anterior

- aceite de oliva

- laurel

- morcilla

- guindilla

- huevos duros para adornar el plato


Preparación:

Es necesario que las habas se pongan en remojo como mínimo veinticuatro horas antes de cocinarlas. De esta manera la legumbre se hidrata y ablanda, haciendo más rápida su cocción. Se aconseja cambiar esta agua, ya que el haba suelta hidratos de carbono.

Primero hacemos el refrito con la cebolla muy picadita y el tomate, vamos incorporando todos los ingredientes, las habas, el laurel, la cabeza de ajos, la pimienta molida, la añora en crudo, el chorizo a rodajas gruesas, los huesos de jamón, la guindilla etc Todo menos la morcilla que se añade 5 minutos antes de apartar del fuego y el huevo duro que es para presentar cada uno en su plato.

Cubrimos de agua, 1 dedo por encima de los ingredientes y esperamos a que hierva todo. Cuando ya esté hirviendo, cerramos la olla exprés y una vez que pite, ponemos a fuego lento y contaremos media hora de cocción.

Pasado éste tiempo abriremos la olla y ya con la tapa abierta añadiremos la morcilla.

El plato no debe quedar ni demasiado caldoso, ni muy seco. Ha de quedar meloso.

El picante dependerá del gusto de los comensales.

Suelen acompañarse de un vino de la tierra.



domingo, 16 de mayo de 2010

Patas de cerdo, una comida anti-age





En materia de productos y recursos que retrasen el envejecimiento pocas son las cosas que nos sorprenden, sin embargo siempre hay alguien dispuesto a hacerlo. En esta oportunidad la novedad llega desde Nueva York donde un restaurante japonés está haciendo estragos con uno de los productos que hay en su carta: patas de cerdo.
Las patas de cerdo son anti-age. Himi Okajima, dueño del emprendimiento dice que la razón por la que las patas de cerdo retrasan el envejecimiento es que son ricas en colágeno.
Se podría decir que "Los Neoyorquinos comen colágeno"
El colágeno es la proteína responsable por la firmeza de la piel, éste ayuda a la piel a retener la humedad haciendo que el cabello y la piel luzcan mejor.
De toda formas si no os gustan las patas podeis incluir en vuestra dieta otros alimentos como son: espinacas, tomates, manzanas, cerezas y pescados (salmón y sardinas).
Esta receta me la dió una compañera de trabajo, Maria del Mar

Ingredientes:
- 2 patas de cerdo cortadas a cuartos
- 2 hojas de laurel
- una cabeza de ajos
- pimienta en grano
- una cebolla gorda
- un tomate grande rojo
- 1 guindilla
- un puñado de almendras
- 2 rodajas de pan frito
- azafrán

Preparación:
Ponemos en la olla rápida las patas ya limpias de pelos (se queman con un mechero) de todas formas ya las venden limpias. Se les cubre de agua, se añade la cabeza de ajos entera, la pimienta en granos, un poco de sal y el laurel. Cuando comience a hervir cerrar la olla y cuando empiece a pitar bajar el fuego y dejar cocer media hora.
Una vez cocidas dejar en espera.
Vamos con la salsa. Hacemos en una sarten un refrito con la cebolla menudita, el tomate rojo, la guindilla entera, las almendras, el laurel, pimienta en grano. Cuando esté casi frito, se le añade el pan y se mueve bien todo hasta que el sofrito esté hecho. Poner el sofrito en el vaso de la batidora, añadir agua de la cocción de las patas y una carterilla de azafrán (la guindilla dejarla entera, a no ser que os guste mucho el picante)
Batir todo muy bien y echar a las patas que estaban esperando en la olla. Mover durante 10 minuto para que los sabores se amalgamen y a comer con una barra de pan para el mojeteo.

domingo, 2 de mayo de 2010

Tarta de fresas y chocolate



Bueno ésta tartita la hice hace tiempo, pero como tengo tantas fotos atrasadas, las pongo poco a poco.
Se me ocurrió un día que me encontré con fresas que se estaban poniendo un poco pochas.

Ingredientes:
- 1/2 k de fresas
- 1 tubo de galletas maría
- margarina
- chocolate 1/2 tableta
- 1 sobre de cuajada
- 2 vasos de leche
- 3 hojas de gelatina
- azúcar, 3 cucharadas


Preparación:
Primeramente trituramos las galletas junto con la margarina y forramos un molde (yo utilicé un haro desmontable) metemos el molde con el fondo y las paredes forradas de galletas en el frigorifico, después ponemos en agua fria las hojas de gelatina para que hidraten.

En un cazo al fuego incorporamos las fresas troceadas y limpias, el azúcar y un chorreoncito de agua. Dejamos que se ablanden a fuego lento, hasta que se haga una mermelada.

De los 2 vasos de leche, separamos poco más de medio lo ponemos en un bol junto con el sobre de cuajada, removemos y el resto de la leche la ponemos al fuego. Cuando esté a punto de hervir incorporamos la cuajada del bol disuelta en la leche fria, removemos con cuidado hasta que veamos que espesa. Apartamos de fuego y añadimos las hojas de gelatina.
Cuando ambas cosas, cuajada y fresas están templadas, se unen y se dejan enfriar.

Una vez fria, troceamos el chocolate a groso modo, que se vean los trozos y movemos con un tenedor. Ya podemos sacar el molde con las galletas del frigo y rellenarlo con la mezcla anterior.
Volvemos a guardarla en el frigo y dejamos allí mínimo 3 horas para que cuaje.

Una que veamos que tiene consistencia, adornamos antes de que esté dura del todo.
Cuanto más fresquita se coma, más rica.




Que no os pase lo que a mí, me despiste y quise correr mucho, añadí el chocolate antes de que estuviera fria la cuajada y al moverlo con el tenedor se me derritió con el calor. Paré y cuando enfrió del todo añadí el resto del chocolate.